1
Hay lugar en la amplia viña para todo labrador;
ven y ayuda en la campiña del amante Salvador.
Hoy esperan muchas almas la salud espiritual;
diles que Jesús las llama a su reino celestial.
Coro:
Un lugar propicio quiero donde pueda trabajar;
aunque humilde, yo prefiero ir de Cristo a predicar;
dar la luz de Cristo al mundo
que se encuentra en perdición,
ha de ser celo profundo que domine el corazón.
2
Quiero ser un buen maestro como fuera el Redentor;
dar la Biblia al mundo entero, donde encuentre salvación.
A los que le han conocido Jesucristo invita hoy
a salvar a los perdidos por los cuales él murió.
3
Con las huestes celestiales ante el trono de Jesús
han de unirse los mortales redimidos por la cruz.
Y con gozo allá en la gloria cantaremos la canción
de los triunfos y victorias que nos dieron redención.