1
Hay una fuente sin igual, la sangre de Emanuel,
en donde lava cada cual las manchas que hay en él,
las manchas que hay en él, las manchas que hay en él;
en donde lava cada cual las manchas que hay en él.
2
El malhechor se convirtió muriendo en una cruz,
al ver la sangre que vertió sin culpa el buen Jesús,
sin culpa el buen Jesús, sin culpa el buen Jesús;
al ver la sangre que vertió sin culpa el buen Jesús.
3
Y yo también, cuan malo soy, lavarme allí podré;
y en tanto que en el mundo estoy su gloria cantaré,
su gloria cantaré, su gloria cantaré;
y en tanto que en el mundo estoy su gloria cantaré.
4
Y cuando del sepulcro ya resucitado esté,
canción más noble y dulce allá en gloria entonaré,
en gloria entonaré, en gloria entonaré;
canción más nombre y dulce allá en gloria entonaré.