1
¡Qué feliz! ¡Qué feliz! La familia de Dios.
Todos somos hermanos en el Señor.
Grandes y chicos, no importa el color,
somos una familia, familia de Dios.
2
¡Soy feliz porque estoy en la iglesia de Dios!
Me limpió con su sangre mi Salvador.
Cristo nos guía al hogar celestial;
somos una familia, familia de Dios.